En un sector en constante evolución como el de la logística, la formación en tecnología ya no es una opción, sino una necesidad. Las empresas que apuestan por el desarrollo de sus equipos mediante capacitación tecnológica están no solo mejorando su eficiencia operativa, sino también fortaleciendo su posición competitiva en el mercado. Analizamos por qué invertir en la formación tecnológica del personal logístico es tan importante y cómo puede traducirse en beneficios tangibles para las empresas.
Un sector marcado por la digitalización
La logística ha sido uno de los sectores en los que más ha impactado la transformación digital. Herramientas como los sistemas de gestión de almacenes (WMS), el internet de las cosas (IoT), la inteligencia artificial (IA) y los vehículos autónomos, están revolucionando las operaciones logísticas. Sin embargo, la implementación de estas tecnologías necesita un personal capacitado que sepa utilizarlas de manera eficiente.
A pesar de los avances tecnológicos, muchos profesionales aún carecen de las habilidades e infraestructuras necesarias para adaptarse a estos cambios. Actualmente, solo un 17% de los directores de área cree tener una infraestructura tecnológica lo suficientemente madura para adoptar la IA, según un reciente estudio llevado a cabo por CEL y Accenture.
Formación como herramienta estratégica
Incorporar la tecnología en las operaciones logísticas es un proceso que requiere más que adquirir herramientas avanzadas. El verdadero valor se obtiene cuando estas se utilizan de forma óptima, y para ello, el personal debe estar capacitado.
La formación tecnológica permite:
- Aumentar la productividad: un personal que domina las herramientas digitales puede realizar tareas con mayor rapidez y precisión.
- Reducir los costes operativos: un equipo formado minimiza errores y optimiza el uso de los recursos tecnológicos.
- Fomentar la innovación: trabajadores capacitados son más propensos a identificar oportunidades de mejora en procesos y operaciones.
Áreas clave de formación tecnológica
Para maximizar el impacto de la formación en tecnología, las empresas logísticas deben enfocarse en áreas específicas que sean relevantes para su modelo de negocio:
- Gestión de datos
La logística actual se basa en la capacidad de analizar datos en tiempo real para tomar decisiones informadas. Capacitar al personal en el uso de herramientas de análisis de datos, big data y software de visualización es fundamental. - Automatización de procesos
La robótica y la automatización están redefiniendo los almacenes y centros de distribución. La formación en el manejo de robots, sistemas de picking automatizado y software de control puede marcar una gran diferencia en la eficiencia operativa. - Sistemas de gestión de almacenes (WMS)
La formación en plataformas SGA, como la de V10, no solo mejora la gestión de inventarios, sino que también optimiza el flujo de trabajo y reduce los tiempos de inactividad. - Ciberseguridad
A medida que las operaciones se digitalizan, la seguridad de los datos se convierte en una prioridad. Capacitar al personal en prácticas de ciberseguridad ayuda a proteger la información sensible de la empresa y de los clientes. - Vehículos autónomos y sostenibilidad
Con el auge de los vehículos autónomos y la necesidad de reducir el impacto ambiental, formar al personal en la gestión de estas tecnologías es un paso hacia un futuro más sostenible.
Retos en la implementación de formación tecnológica
Aunque los beneficios son claros, implementar programas de formación tecnológica también conlleva retos que las empresas deben afrontar:
- Resistencia al cambio: es común que el personal, especialmente aquellos con más años en la industria, se muestre reacio a adoptar nuevas tecnologías.
- Costes iniciales: la inversión en formación puede ser elevada, pero debe considerarse como un gasto estratégico que genera beneficios a largo plazo.
- Identificación de necesidades: no todas las empresas tienen claro qué áreas de formación tecnológica son prioritarias para su modelo de negocio.
Superar estos desafíos requiere una estrategia bien definida que incluya un análisis de necesidades, el diseño de programas personalizados y el seguimiento de los resultados obtenidos.
Beneficios para las empresas y los empleados
Invertir en la formación tecnológica no solo beneficia a las empresas, sino también al personal logístico. Para los trabajadores, esta capacitación abre puertas a nuevas oportunidades de crecimiento profesional y mejora su empleabilidad en un sector cada vez más digitalizado.
Para las empresas, los beneficios incluyen:
- Mayor retención del talento: los empleados valoran trabajar en organizaciones que invierten en su desarrollo.
- Mejor experiencia del cliente: un equipo capacitado puede garantizar entregas más rápidas y un mejor servicio al cliente.
- Adaptabilidad al cambio: las empresas con personal capacitado están mejor preparadas para afrontar las transformaciones del sector.
Un futuro logístico liderado por la formación
La logística está en un punto de inflexión, y la tecnología será el motor de su evolución en los próximos años. Sin embargo, este avance solo será posible si las empresas invierten en la formación de su personal.
En V10, entendemos que el capital humano es el activo más valioso de una organización. Por ello, fomentamos la implementación de programas de formación tecnológica que permitan a las empresas alcanzar sus objetivos estratégicos y mantenerse a la vanguardia en un sector tan dinámico como el logístico. Porque, en última instancia, el éxito logístico no se mide sólo en términos de tecnología, sino también en la capacidad de las personas para aprovecharla al máximo.