Invertir en soluciones para desarrollar inventarios a prueba de crisis es como comprar un seguro: dedicar tiempo, mano de obra y recursos a algo que espera no necesitar nunca.
La crisis abrupta de la cadena de suministro ha llevado a las empresas a luchar por acceder a las materias primas y la mano de obra que necesitan para fabricar bienes. Para agravar el problema, los picos erráticos en la demanda, donde los costes inflados de los materiales y sistemas de distribución siguen marcando el ritmo, añaden un nuevo grado de complejidad.
Frente a este desafío sin precedentes, cada vez son más las empresas que están apostando por reforzar una tendencia que lleva años modelando el sector, la digitalización y automatización de procesos.
¿Qué factores están alimentando la crisis y afectando a los inventarios?
Actualmente, hay una serie de impulsores de estos problemas relacionados con la cadena de suministro y el servicio al cliente, algunos de los cuales están interrelacionados:
- Los picos de demanda causados por el desequilibrio desencadenado por la crisis sanitaria de 2020.
- La escasez de materias primas o componentes, que se ha visto exacerbada por la pandemia, los problemas del comercio mundial y los picos de precios de las materias primas.
- La escasez de mano de obra, que puede ser un signo de un cambio fundamental en la participación laboral desencadenado por la pandemia.
- La escasez de capacidad de fabricación causada por la escasez de mano de obra, que sigue interrumpiendo el cumplimiento global y cambia rápidamente la demanda.
- Los problemas de transporte causados por una acumulación masiva en los puertosy la escasez de camioneros que comenzaron antes de la pandemia y se han visto exacerbados por el aumento de la demanda y la jubilación de los camioneros. Solo en España, según ASTIC, faltan 20.000 profesionales de este gremio.
Cómo preparar el inventario frente a las crisis
Una vez puesto de manifiesto la necesidad de establecer planes de contingencia, no solo para la COVID-19, sino para emergencias de todo tipo, podemos identificar tres pasos clave para preparar los stocks ante cualquier impacto.
La idea detrás de cada uno de ellos es frenar el avance de las interrupciones en la cadena de suministro que, según Accenture, pueden llegar a costar casi el 7% del PIB de la zona euro solo en 2023.
1. Paso uno: evaluar
El primer paso para crear un plan de contingencia efectivo es realizar una evaluación de riesgos dentro de su almacén. Comience por mapear procesos, procedimientos, tecnologías y personal críticos para el negocio para crear una base para su plan de contingencia de almacén. A riesgo de decir lo obvio, estas operaciones son la piedra angular de su negocio y deben continuar con normalidad incluso en caso de emergencia.
2. Paso dos: planificar
Una vez completada la evaluación de riesgos, comienza la creación del plan de contingencia para el inventario. Ya sea en respuesta a un evento global o algo tan simple como el mal funcionamiento de un equipo, cada plan de contingencia de almacén debe describir, como mínimo:
- Desencadenantes específicos. Estos dictan lo que pondrá en marcha su plan.
- Estrategia de respuesta. El plan debe incluir una breve descripción de cómo debe responder el personal.
- Funciones y responsabilidades clave. Defina claramente quién es responsable de promulgar las diferentes partes del plan.
- Tecnología. Uno de los elementos más críticos de cualquier plan de contingencia de almacén es un esquema completo de todos los sistemas tecnológicos y su papel frente a las diferentes amenazas.
3. Paso tres: comunicar
Ahora que tiene un plan de contingencia de almacén completamente formado, es hora de implementarlo en todos los niveles de su negocio, y para hacerlo, primero debe comunicarlo claramente a todos los niveles de su negocio.
Tecnología: el aliado imprescindible
Como queda reflejado en el segundo paso, la tecnología es un elemento tan imprescindible como la propia evaluación, planificación y comunicación. Y no es para menos. En los últimos años, estas herramientas han ayudado a solucionar múltiples contingencias a través de soluciones como:
- Sistemas de gestión de inventarios
- Machine learning
- Big Data
Estos tres elementos no solo facilitan la labor interna del almacén, también extienden sus redes de influencia a toda la cadena de suministro. Así, los SGI son herramientas que permiten rastrear los bienes a lo largo de toda la supply chain, teniendo en cuenta los procesos con los que opera cada tipo de negocio.
Por su parte, los impulsores de la logística 4.0 favorecen el desarrollo de analíticas de predicción de la demanda e incluso herramientas tan avanzadas como los gemelos digitales. Estos últimos permiten recrear simulaciones y poner a prueba la eficacia de los planes de contingencia.
En términos generales, ante un panorama en el que las previsiones apuntan a un creciente nivel de tensión en las cadenas de suministro, las soluciones tecnológicas se postulan como un elemento imprescindible para hacer que los inventarios estén a prueba de crisis.