El sector del transporte es, desde hace décadas, una de las principales fuentes de contaminación. Este hecho, inevitablemente, hace que se trate de una actividad con un importante impacto en el medio ambiente.
En consecuencia, en los últimos años, las empresas del sector han ido implementando nuevas medidas para reducir su huella de carbono y conseguir alcanzar una logística más sostenible. Si bien es cierto que se ha hecho uso de distintas herramientas, cabe destacar que uno de los principales medios utilizados para esta misión han sido las nuevas tecnologías. Pero ¿cómo pueden ayudar éstas a reducir el impacto medioambiental del transporte?
La importancia de la sostenibilidad en los procesos logísticos
En España, el sistema de transportes funciona, principalmente, mediante la utilización de camiones, lo que hace que la contaminación diaria sea extremadamente elevada. Más aún teniendo en cuenta el alto coste que tiene para las empresas la adquisición de vehículos eléctricos, que hace que sea complicado conseguir una movilidad sostenible únicamente a través de esa vía.
Si de algo no hay duda es de que el transporte es uno de los sectores que emite más gases de efecto invernadero, por lo que, a su vez, es uno de los sectores que más esfuerzos tiene que hacer para trabajar en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030.
Hoy en día, para cubrir las necesidades que requiere la sociedad y, al mismo tiempo, cumplir con lo que exigen las políticas europeas, las empresas del sector logístico y del transporte tienen que implementar prácticas sostenibles en todas las etapas de su cadena, desde los primeros pasos de producción, hasta la recepción final por parte de los clientes.
Hacerlo, inevitablemente, es imprescindible hoy en día para la logística y el transporte, ya que, a corto plazo, el principal objetivo de la movilidad sostenible es que los países desarrollados cuenten con una movilidad ecológica y accesible. Por ello, utilizar métodos y herramientas que busquen incrementar la sostenibilidad en la cadena de suministros se ha convertido en un factor clave para todas las empresas del sector.
Cómo invertir en nuevas tecnologías puede mejorar la sostenibilidad del transporte
Con la llegada de la digitalización, la aparición de nuevas herramientas tecnológicas ha aumentado de forma exponencial. Los clientes finales son cada vez más exigentes a la hora de contratar servicios o adquirir productos, pero también reclaman sostenibilidad en los procesos, lo que puede complicar la relación entre rentabilidad y optimización de las cadenas de suministro.
En consecuencia, para poder cubrir todas las necesidades que requiere el sector y, a su vez, cumplir con los objetivos de sostenibilidad de la Agenda 2030, es necesario -y prácticamente imprescindible- hacer uso de todas las tecnologías disponibles. Pero ¿qué pueden éstas aportar realmente a las empresas logísticas y de transporte?
La realidad es que implementar prácticas sostenibles en toda la cadena de suministro, como puede ser el uso de nuevos materiales o la reducción de las emisiones de CO2 con la adquisición de nuevos medios de transporte, puede ser beneficioso para reducir la huella de carbono, pero también puede ayudar a la rentabilidad.
Utilizar softwares de última generación puede aportar a las empresas logísticas y de transporte todos esos beneficios que necesitan, así como ayudarles a cubrir todas las necesidades que surgen cuando se prioriza la sostenibilidad.
A través de ellos, se puede mejorar la calidad de los servicios sin dejar a un lado el objetivo de reducir el impacto medioambiental causado por los mismos. Por un lado, haciendo uso de uno o varios softwares se pueden obtener beneficios sociales, ya que los procesos pueden adaptarse lo máximo posible a las necesidades sostenibles que reclaman los países europeos.
Por otro lado, también se pueden obtener beneficios económicos ya que, la utilización de las nuevas tecnologías en el transporte y la logística permite optimizar la cadena de suministros sin afectar a la rentabilidad de la misma.
Hoy en día, en un mundo que no deja de cambiar y avanzar, hacer uso de herramientas tecnológicas es clave para conseguir que el sector del transporte y la logística logren reducir su impacto medioambiental.
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